Yo empecé a usar Linux por allá en el año 2009, en marzo precisamente, justo al empezar mi tercero medio (son 4 años la enseñanza media y luego la universidad).
Lo conocí a través de un chat, donde decía que quería ser lammer, y me recomendaron linux.
Tras varios meses de investigación, y luego de convencerlo e instalarle ubuntu a mi hermano cuando se iba a la universidad, decidí yo emprender en Linux. Y la "distro" elegida fue "Debian".
Estuve alrededor de un año usando debian, para luego cambiarme a ubuntu y luego fedora.
Después, a mediados de mi cuarto medio, decidí emprender en ArchLinux, la distro que seguía como "natural" al proceso de mi adopción linuxera.
Me demoré 3 dias en instalarlo y dejarlo "usable" con interfaz gráfica, programas, etc. No sin antes haber pasado varias semanas leyendo completamente todos los manuales habidos y por haber y videos para instalar y configurar ArchLinux.
Pero cuando entré a la universidad a estudiar informática, pensé que no iba a tener suficiente tiempo para "mantenerlo", y decidí cambiarme a Fedora.
Eso hasta un par de meses, donde volví a ubuntu, el que uso actualmente con Mate.
Pero quedémonos en ArchLinux...
Esta distro, cuando yo la instalé, venía con un instalador en ncurses, es decir sin usar nunca un mouse y sin "ventanas" tal como las conocemos; sino que texto y colores.
Luego de instalarla, te enfrentas a una consola, nada más que una pantalla negra con letras blancas donde dice "login" invitándote a ingresar. Sin embargo sólo viene con usuario "root" o administrador, con el cual debemos crear un usuario nosotros.
Después de crear el usuario viene la parte dura: Instalar y configurar todo el sistema gráfico, todo a mano.
Después de tener todo configurado y listo para usar, hay que preocuparse de actualizar; y es que con Arch tendrás muchas actualizaciones diarias.
Con cada paquete actualizado, vienen "comentarios" en la terminal. Algunos dicen dependencias opcionales, como plugins y cosas por el estilo para darle más funcionalidad; otros en cambio, dicen cosas como "debes cambiarle el nombre al archivo <archivo> a <archivo2>" (en inglés obviamente). Ignorar aquellas advertencias puede ser fatal para tu computador, y es que ignorarlas puede recaer en que la aplicación no funcione (como pasa la mayoría de las veces), o funcionar mal. Eso no sería tan trágico si fuera el juego de buscaminas o ajedrez, pero si es un programa inherente al sistema operativo, como por ejemplo el núcleo, puede ser fatal, al punto de no poder volver a entrar.
Y eso es porque la filosofía de Arch se podría resumir en "para qué hacer parches si lo pueden hacer los mismos usuarios".
A veces, las menos, se les olvida poner el mensaje o se dan cuenta de un error después de publicado el programa en la base de datos. En esos casos NUNCA hay que hacer lo que a uno se le ocurra, sino hay que buscar en los foros de Arch por una solución.
Uno de esos errores se enfrentó mi hermano, y lo que hizo fue forzar la instalación, a pesar de errores. ¿Qué le pasó? Le quedó inutilizable.
De eso pasó mucho tiempo, donde sólo usaba windows; por flojera. Ahora que tiene tiempo libre se puso a repararlo. ¿Resultado? Noches en vela, y error tras error. Apoyado en su tablet para buscar soluciones y manuales.
Con todo esto no quiero decir que Arch es un mal sistema operativo, y creo firmemente que quien quiera aprender realmente a usar linux, y a conocerlo "por dentro", lo más recomendable y "rápido" es usar ArchLinux.
En ArchLinux te obligan a tener "buenas costumbres" al momento de usar un pc. Éstas son leer la documentacion, los manuales, las advertencias, y todo aquello que un usuario común le da a "siguiente" sin leer. Y te lo enseña de la manera más cruda que puede haber: dejándote inutilizable el programa, y con una solución muchas veces muy difícil que pasa por -comunmente- reinstalarlo (cosa difícil si es un programa necesario para el funcionamiento del sistema operativo).
Considero que cualquiera que quiera aprender realmente a usar linux, y saber administrarlo, debería usar Arch -o tal vez gentoo- y saber cómo funcionan las cosas por dentro, no depender de las interfaces gráficas, y manejarse fluidamente en un entorno Linux.
Mi hermano no lo instaló por eso, sino por su -a mi parecer, a lo menos "raro" y "con poco sentido"- afán de poder modificar y configurar todo. Y ahí está, modificándolo y configurándolo todo.
En todo caso, insisto encarecidamente a no usar Arch si no se tiene una experiencia más o menos acabada en linux, sin manejarse en la consola, o sin haber leído los manuales y tenerlos impresos, o una fuente fácil y rápida de accederlos.
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